Hay gente que comete el error de hablar sin tener una base para hacerlo, esto es hablar sin tener nada que decir.
Por más aparentemente improvisado que sea un mensaje, este debe tener una consistencia, un referente, un punto lógico.
Si no se domina el tema, si no se tienen todos los datos o si ya se dijo todo, la mejor expresión es el silencio.
Solamente se expone un tema si se tiene lo suficientemente bien preparado, con datos coherentes y exactos.
Nunca se recordará un silencio, pero si se recordaran todos de un yerro