Toda persona debe tener como norma en su vida, los efectos que pueden causar sus palabras.
Las palabras son iguales al tallado que un escultor hace sobre una piedra;ya no pueden borrarse,sin que la piedra pierda gran parte de su naturaleza.
Una palabra edificante, provechosa, oportuna, traerá riquezas para el que las pronuncia y el que las escucha.
Una palabra descompuesta arrastra ira, desasosiego, confusión y desorientación en general.
De usted depende, hablar, solo cuando vaya a enseñar, construir y dar buen ejemplo.
La correcta comunicación, inicia con la propia actitud.
¿Sabe por que se lo digo?, porque logra llevar su mensaje de manera mas eficiente, quien habla primero con el corazón y después con la mente, que quien lo hace al revés .
Si esta pensando en abrazar la comunicación como eje sustantivo de su vida comience por hacerse las siguientes preguntas. Por supuesto, contéstesela con toda sinceridad.
¿Quién Soy?
¿Qué Hago?
¿Qué pienso de mí?
¿Qué proyecto a los demás?
¿Cuáles son mis metas?
Inmediatas: Mediatas, Futuro Próximo
¿Cómo me ven los demás?
¿Me considero rígido(a) o flexible?
¿Tengo bienes? No Si es si, cuales son
¿Qué pienso de mi personalidad y carácter?