Los obstáculos de la comunicación traban o destruyen las interacciones personales y dificultan la transmisión y compresión de los mensajes.
Un obstáculo comunicacional frecuente y pocas veces detectado es la misantropía, que consiste en un sentimiento de desconfianza, aversión o desprecio hacia las personas.
Quien no acepta a los demás, difícilmente logra comunicarse efectivamente y tiende a crear barreras para realizar una comunicación efectiva personal y profesionalmente.
Los misántropoos son incapaces de construir relaciones positivas con los demás, carecen de empatía, mantienen una actitud negativa, se aíslan y hacen de la desconfianza en la gente un modo habitual de actuación.